Es un… ¿adiós?, Misaki x Usagi One Shot

Bueno como prometi poner mis fics espero les agrade n_n este fue el primero que hice espero sus comentarios
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Era una tarde nublada Usagi se encontraba sentado en el sofá junto a Suzuki, meditando con respecto al bienestar del chibi-tan, pocas veces se encontraba como ese día hasta que el ruido de la puerta lo saco de sus pensamientos.

- nee, Usagi ya eh vuelto y traído la comida- decía entusiasmado el pequeño pelicastaño mostrándole unas bolsas blancas que tenia en las manos

-mmm…. No deseo comer hoy- el rubio se apoyo en el respaldo del sofá

Misaki se coloco frente a él observándolo fijamente, presentía que algo no estaba bien

-acaso ocurre algo Usagi- cuestiono sentándose a su derecha manteniendo en medio al enorme oso de peluche

-tú, acaso estas bien conmigo, realmente estas aquí por que lo disfrutas y sabes que eres libre de irte el día que tú desees verdad- se mantenía cabizbajo al decirlo, aun cuando lo amaba, sabía que el menor también tenia ilusiones y deseos, y no deseaba verlos frustrados solo por querer mantenerse a su lado

-pero…. Pero por que dices eso, acoso no quieres que me quede- sus ojos comenzaron a aguar, dejando caer unas lagrimas por sus mejillas.

El mayor se mantenía serio levantándose de golpe –es tu dedición si deseas puedes irte- dicho esto subió las escaleras encerrándose en su habitación dejando perplejo al pelicastaño

-idiota Usagi ¡idiota!- gritó molesto aventando una almohada contra Suzuki

Misaki comenzó a empacar, sin siquiera pensarlo mantenía un aura de tristeza -idiota solo tenias que decirme que querías que me fuera, y no tener que hacer como si nada pasara- musitaba entre dientes. Al terminar de guardar sus cosas subió para despedirse del escritor

- Usagi me voy - mantenía una pequeña esperanza de que el otro saliera y le dijera que no se fuera, que lo necesitaba, pero al no recibir respuesta se dio media vuelta para bajar las escaleras, mientras mordía su labio inferior

-Suzuki me voy, tú si me escuchaste verdad- su voz comenzó a quebrarse tomando al peluche entra sus manos estrujándolo con fuerza, hundiendo su rostro en la cabeza del muñeco de felpa

-en verdad piensas irte Misaki- comenzó a bajar las escaleras, fumando mientras veía de reojo al menor

-tú dijiste que me fuera, ahora no me salgas con que se te olvido- soltó al oso comenzando a subir el volumen de su voz, dejando escapar unas lagrimas de sus ojos

- no, yo solo te dije que si deseabas, no que te fueras aprende a escuchar- su semblante era serio casi increblantable como siempre

-pero… pero tú dijiste- trataba de analizar lo que le había dicho

-tú supusiste que te corría, más no fue así- se acerco a él colocándose de frente, acariciando con suavidad sus mejillas con el dorso de la mano, ocasionándole un ligero rubor en las mejillas

-sabes que te amo y jamás dejaría que te fueras aun cuando lo desearas y si dije eso fue para saber si realmente serias capaz de irte y por lo visto eres bastante ingenuo- sonrió de lado revolviéndole el cabello con la mano diestra

-Usagi idiota- sentía el tacto del mayor haciendo que se sonrojara aun más, no sé atrevía a levantar el rostro

-te amo Misaki- dejo escapar un leve murmuro en su oído, su voz era seca, pero aquellas palabras eran tan dulces para el chibi-tan que casi no concebía que se atreviese a decirlo

-cállate Usagi- cerró los ojos con fuerza, aumentando el rubor en sus mejillas, comenzaba a sentir que sus labios eran invadidos por los del mayor, trataba de seguirle en el beso.

-espera…usagi…. Aquí no- ya lo tenía encima cuando quiso detenerlo tapándose el rostro con ambas manos

-deseo ver tu rostro, no quiero que lo ocultes- retiro con delicadeza sus manos, deleitándose con aquel rostro que veía cada día, el castaño mantenía los ojos cerrados tratando de no verle

-te amo Misaki- repetía por momentos, mientras sus ágiles manos despojaban al menor de su camisa dejando al descubierto el pecho y abdomen del menor. Comenzó a lamer su cuello bajando hasta su pecho, degustando sus pezones haciendo que el menor comenzara a gemir

Su mano derecha se acerco tentativamente a su entrepierna acariciándole por encima de la ropa, sintiendo como reaccionaba a cada caricia dada, desabotono su pantalón para introducir su mano, aprisionando su miembro para comenzar a masturbarlo, ocasionando que el castaño arqueara la espalda a causa de la excitación.

El escritor había disfrutado hacia ya tiempo de aquel hermoso cuerpo, pero no podía dejar de sentirse atraído cada que lo veía, agacho el rostro introduciendo su miembro a la boca, succionándolo suavemente haciendo que el pelicastaño soltara un fuerte gemido para regocijo del rubio

-usagi… si continuas así… ¡ah!- no podía siquiera hablar fluido debido a su agitada respiración

-espera Misaki aun no empiezo- se coloco en medio de sus piernas abriéndolas con cuidado, para tener un fácil acceso, coloco con cuidado la punta de su miembro sobre la estrecha entrada moviéndola en círculos tratando de dilatarlo y causarle el menor dolor posible

-usagi ¡ah! espera- susurro ocasionando que el mayor se detuviera

- en verdad deseas que me detenga - se inclinó un poco para verle directamente a los ojos, el pelicastaño solo negó con la cabeza mantenía aun los ojos cerrados

Sonrió de lado comenzando a penetrarlo con cuidado el menor lo rodeo con sus brazos por la espalda hundiendo sus dedos e, comenzando a gemir cerca de su oído, haciendo que el mayor aumentara el ritmo tomándolo por las caderas elevándolas un poco para hacer el vaivén mas rápido, se mantuvo así un momento.

Sin salirse de él lo coloco en cuatro para poder penetrarlo mas profundo, su mano comenzó a buscar el miembro del chibi-tan tomándolo para masturbarlo al ritmo que lo penetraba

-usagi ¡umgh!- trataba de detenerlo, pero no podía o mejor dicho no quería el placer que le proporcionaba era indescriptible.

-Misaki, ya casi…- lo tomo de uno de sus brazos para sentarlo en sus piernas de espaldas, tomándolo de la cintura para ayudarle

-Usagi... te… amo- esa última palabra fue casi inaudible incluso para el mismo Misaki, pero eso le basto al mayor agradeciendo el gesto lamiéndole el cuello con delicadeza

-yo también Misaki- dicho esto sintió como recorría un escalofrió por el cuerpo del menor, anunciando su orgasmo seguido por el de Usagi.

Apoyo el rostro en la espalda de su amado castaño sonriendo levemente, lo recostó junto a él mirándolo con ternura mientras retiraba con cuidado algunos mechones de cabello de su rostro

-en verdad puedo quedarme- susurro el castaño manteniendo la vista abajo

-todo el tiempo que desees- sonrió besándole la frente